Recomendaciones para un Verano Cardiosaludable

Ya queda muy poco para que llegue el verano. En esta época del año, en general, cambiamos nuestra rutina, disfrutando de más tiempo libre y de ocio (se realiza más actividad física, se come más veces fuera de casa…). Pero estos cambios pueden producir algún problema cardiovascular, sobre todo, en aquellas personas con enfermedades cardiológicas previas.

Verano cardiosaludable

Hay una serie de orientaciones básicas con las que podemos prevenir estos problemas:

Mantener una hidratación adecuada

Durante el verano perdemos más liquido del habitual al sudar más por el calor. Para evitar deshidratarnos, es necesario beber agua con más frecuencia, incluso aunque no tengamos sed.

En general, las personas sin problemas cardíacos, deberían beber en torno a 2-2.5 litros de agua al día.

En los pacientes con Insuficiencia Cardíaca, lo más recomendable es consultar este aspecto con el Médico de Atención Primaria o Cardiólogo, dado que según su situación habitual, la cantidad de diurético que tome, etc, la cantidad de agua a beber en un día puede oscilar.

Precaución con el sol

En las horas centrales del día, cuando las temperaturas son más altas, es cuando existe un mayor riesgo de deshidratación, por lo que se recomienda evitar exposiciones prolongadas al sol durante esas horas.

Durante el resto del día, “tomar el sol” durante 15-20 minutos, permite sintetizar vitamina D en cantidades adecuadas.

Actividad física durante las vacaciones

Lo primero que se debería tener en cuenta es que si no realizamos ejercicio físico habitualmente, no es una gran idea empezar en las vacaciones a hacer actividades físicas moderadas o intensas.

Debemos tener en cuenta, además, si las condiciones climatológicas son distintas a las que estamos acostumbrados habitualmente (no es lo mismo el verano en Asturias que en Andalucía…)

Se recomienda practicar deporte al amanecer o atardecer, si es posible. En todo caso, evitar la franja horaria entre 12.00 y 18.00 horas.

Es importante, también, llevar ropa adecuada (ligera y transpirable) e incrementar la hidratación.

Dieta lo más cardiosaludable posible

En la medida de lo posible, y aunque comamos fuera de casa, se debe intentar mantener una alimentación saludable, que incluya pescado, verduras y frutas (que además son ricas en agua y pueden contribuir notablemente al aporte total de agua que necesitamos), cereales integrales y legumbres.

Al igual que durante las Navidades, se debe evitar los excesos en las comidas o cenas, sobre todo en pacientes con insuficiencia cardíaca, ya que puede provocar una descompensación.

En caso de beber alcohol, con moderación, ya que favorece la deshidratación, y, cuando se consume en exceso, favorece la presencia de arritmias como la fibrilación auricular.

Tomar correctamente la medicación

Durante el verano el incumplimiento de los tratamientos cardiovasculares aumenta un 20% y esto se puede traducir en descompensaciones de los problemas cardiovasculares, precisando, en ocasiones, ingreso hospitalario.

Si nos vamos de vacaciones fuera de casa, es importante llevar toda la medicación que necesitemos, así como el último informe actualizado (en el que conste cual es nuestro problema cardiológico, así como el tratamiento completo).

Para no olvidar tomar el tratamiento, una buena opción es poner una alarma en el móvil que nos recuerde tomar la medicación a la hora adecuada.

Pacientes Hipertensos

Los pacientes hipertensos deben tener en cuenta dos situaciones:

  • por un lado, con el calor, la tensión arterial puede estar más baja, por lo que es posible tener que disminuir la dosis de la medicación. Las personas mayores son especialmente más sensibles al calor porque el mecanismo de la sudoración normalmente está deteriorado y en ellos es muy probable que se presenten problemas cardiacos y renales, por lo que es más difícil deshacerse del exceso de calor en el cuerpo. En este grupo de pacientes es importante tener un cuidado especial. Es preferible consultar con su Médico de Atención Primaria/Cardiólogo antes de modificar la medicación por cuenta propia.
  • por otro lado, si no se toma la medicación adecuadamente o si se come con más sal, se pueden “descontrolar” las cifras tensionales. En este sentido, es recomendable seguir las orientaciones descritas previamente.

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